Fibromas uterinos y embolización de la arteria uterina

Tratamiento para mujeres con fibromas uterinos

Muchas mujeres optan actualmente por un procedimiento llamado embolización de la arteria uterina (EAU) para tratar los fibromas uterinos. Los medicamentos pueden ayudar a reducir el tamaño de los fibromas y se puede realizar una cirugía para extirparlos (miomectomía) o el útero (histerectomía). Sin embargo, los medicamentos no siempre son eficaces y muchas mujeres se resisten a someterse a una cirugía invasiva mayor.

Cómo funciona la embolización de la arteria uterina

Durante la embolización de la arteria uterina, un radiólogo intervencionista realiza una pequeña incisión en la ingle, inserta un catéter delgado en la ingle y utiliza tecnología de imagen para guiarlo hasta el útero. Posteriormente, el médico inyecta diminutas partículas en las arterias a ambos lados del útero, las cuales bloquean el flujo sanguíneo a los miomas uterinos. Sin irrigación sanguínea, los miomas se reducen con el tiempo.

Eficacia de la embolización de la arteria uterina

La embolización de fibromas ha demostrado ser muy eficaz para reducir el sangrado y aliviar el dolor. Muchas mujeres han descrito una mejora significativa de sus síntomas en cuestión de días. Dado que el procedimiento evita la cirugía, muchas mujeres pueden retomar sus actividades diarias al día siguiente.

Después del procedimiento

La embolización de fibromas generalmente requiere una hospitalización de una noche. La recuperación total generalmente toma una o dos semanas, pero puede tomar más tiempo. La embolización de fibromas se considera muy segura; Sin embargo, existen algunos riesgos asociados, como los hay con casi cualquier procedimiento médico. Puede tener fiebre baja durante aproximadamente una semana después del procedimiento, y también puede experimentar dolor de calambres moderados a fuertes durante una o dos semanas.

El tiempo de recuperación para pacientes sometidos a emboloterapia transcatéter para fibromas es de aproximadamente una semana. Las manchas y el flujo vaginal pueden ocurrir durante varias semanas después de completar el procedimiento.