La importancia del lavado de manos

El lavado de manos es un factor clave para prevenir la propagación de infecciones. Simplemente lavarse las manos puede ayudarlo a usted y a quienes lo rodean a evitar enfermarse. Lavarse las manos con agua y jabón elimina los gérmenes que pueda haber recogido de superficies contaminadas, otras personas, animales o desechos. Ya sea que esté en su casa, en el trabajo o en el hospital, es importante mantener sus manos limpias.

En Manatee Memorial Hospital, queremos ayudar a nuestros pacientes y visitantes a mantenerse a salvo de enfermedades infecciosas causadas por gérmenes. Los gérmenes pueden esconderse casi en cualquier lugar y cuando tus manos entran en contacto con ellos, puedes convertirte en portador de enfermedades. Las manos contaminadas pueden propagar cualquier cosa, desde el resfriado común hasta enfermedades más graves como la hepatitis A y la meningitis.

Puede hacer su parte para prevenir la propagación de la enfermedad siguiendo la guía a continuación para lavarse las manos adecuadamente.

La manera correcta de lavarse las manos

  • Mójese las manos con agua tibia y aplique jabón
  • Frote sus manos juntas vigorosamente y frote toda el área durante al menos 20 segundos. ¡No olvides meterte entre tus dedos y debajo de tus uñas!
  • Enjuague bien y cierre el grifo con una toalla
  • Seca tus manos

Si sus manos se contaminan, puede infectarse cada vez que se toca la nariz, la boca o los ojos. Es muy probable que no se lave las manos con la frecuencia que debería. Para evitar infecciones, siempre debe lavarse las manos en estos momentos: 

  • Antes de comer
  • Después de usar el baño
  • Antes, durante y después de preparar la comida.
  • Antes y después de cuidar un corte o herida
  • Después de estornudar, toser o sonarse la nariz
  • Después de manipular animales
  • Cada vez que tus manos están visiblemente sucias
  • Después de entrar en contacto con alguien que ya está enfermo

Si sigue estos pasos y se lava las manos de manera regular y adecuada, puede ayudar a prevenir la propagación de gérmenes y enfermedades.